Protección gástrica: ¿Puedo cambiar el medicamento por un complemento alimenticio?

Escrito por Mar Santamaria Sala el 11/04/2016

Protección gástrica: ¿Puedo cambiar el medicamento por un complemento alimenticio?

En ocasiones, medicarse de manera continuada puede provocar efectos secundarios. Esta semana la consulta trata sobre si el medicamento para un tratamiento del esófago que provoca malestar debe ser substituido por un complemento. Cuando esto ocurre, se debe visitar al especialista para revisar la medicación, los complementos pueden ayudar, pero en ningún casos sustituir un tratamiento. Hoy vemos como el aloe vera puede ayudar al tránsito intestinal y disminuir las molestias. 

Tomo Omeprazol para una estenosis del esófago con hernia de hiato que padezco. Me está haciendo mucho daño, en forma de calambres en las piernas y pies, sequedad de ojos y boca e insomnio. Además, sospecho que impide la absorción de algunas vitaminas o minerales. He oído que existe un líquido a base de áloe vera que funciona, pero no sé donde encontrarlo. ¿Tiene usted algún consejo?

De nuevo, nos encontramos con consultas muy interesantes por parte de nuestros usuarios. La medicación crónica es necesaria en muchos casos y, aunque nos beneficiemos de sus virtudes terapéuticas, la aparición de efectos secundarios severos pueden hacer plantear al médico un cambio de medicación. Lo primero que te aconsejo es que lo hables directamente con el especialista que te ha prescrito el Omeprazol. Es probable que la dosis utilizada sea alta y prolongada en el tiempo (por la condición clínica que comentas). A más dosis y/o periodo de tratamiento, más probabilidad existe de que aparezcan efectos indeseados del medicamento. O bien, puede ser que exista una mala respuesta individual. Habrá que estudiar si hay una correspondencia entre el momento de empezarlo a tomar (o de un incremento de dosis) y la simptomatología que describes, para asegurarse que no se debe a otra causa que no tenga nada que ver con el medicamento.

En el caso del Omeprazol se han descrito algunas precauciones para los tratamientos prolongados. El déficit de vitamina B12 o cianocobalamina puede acontecer en un momento dado (el pH del estómago es menos ácido, por lo que la correcta absorción de la vitamina en el intestino se ve reducida o alterada). Por otro lado, es muy poco frecuente, pero algunas veces puede producirse una bajada importante de los niveles de magnesio (hipomagnesemia). Estas dos situaciones podrían justificar la aparición de cansancio excesivo, calambres, nerviosismo o insomnio. Los niveles de vitamina B12 y magnesio los determinará el médico mediante una analítica, para comprobarlo.

Preservar la salud digestiva

Por tanto, debe ser el médico quién proceda a esta evaluación del tratamiento y, según su criterio, podría pautar una retirada del mismo o la sustitución por otro medicamento que se tolere mejor. Es importante que acudas cuanto antes para realizar la consulta. Pero, ¿podemos tomar algún complemento que ayude al problema digestivo? Sí, aunque tendremos en cuenta que su función es la de “complementar” el estilo de vida y la salud digestiva (de aquí viene lo de “complemento” alimenticio), más que “sustituir” una medicación crónica. Para contribuir al confort digestivo, sí podemos utilizar productos de áloe vera por vía oral.

El áloe vera tiene propiedades depurativas y cicatrizantes, a parte de que contribuye al tránsito intestinal. Aloe Vera Digestivo 30tabl de la marca ESI tiene una gran pureza, está procesada en frío y sin aditivos (proviene de plantas de cultivo ecológico). No contiene gluten, lactosa, azúcares añadidos, ni aromas o colorantes artificiales. Con un solo comprimido al día es suficiente. También se puede tomar bebida o en forma de zumos (ESI zumo de aloe vera 1000ml). Reduce las bebidas con cafeína, las bebidas con gas y los cítricos. Evita sustancias irritantes, como los picantes y el alcohol. Toma una cena ligera, 2 o 3 horas antes de ir a dormir.

También puedes incrementar el consumo de alimentos ricos en vitamina B12 y magnesio, para prevenir posibles carencias. La B12 la encontramos en el pescado azul (sardinas, atún), los huevos, el yogur (los productos lácteos con moderación) y una ración moderada de carne roja a la semana. Las almendras sin tostar (un puñadito al día), las semillas (de calabaza, de lino, de sésamo) y el salvado de trigo son alimentos ricos en magnesio. Si es necesario suplementar estos micronutrientes, es mejor que las vitaminas del grupo B estén combinadas (Vallesol Complex Vitamina B 30comp) o el magnesio esté junto a la B6 (Pileje Formag 90comp). Para potenciar su absorción, tomaremos el complemento bien alejado de la medicación antiácida (hemos visto que influye en su aprovechamiento).

Espero que te encuentres mejor y se solucione el problema.