Son unos mules con anchura especial. La plantilla que llevan es extraíble y puede ser sustituida por otra ortopédica. Está perforada para facilitar la transpiración. Scholl la ha diseñado aplicando una tecnología que consigue incrementar los puntos de apoyo plantares. El resultado es un calzado realizado con materiales de primera calidad, muy cómodo y flexible.
La parte superior de este zapato está realizado en piel y cuenta con un tacón de 2,5 centímetros. Esta elevación es adecuada para mantener la posición natural de la espalda. Está recomendado para mujeres que sientan molestias con los zapatos convencionales y que tengan un pie ancho o inflamado. Por el diseño de la planta, el pie queda perfectamente recogido y proporciona un apoyo amortiguado y blando. Estos mules han sido sometidos a un tratamiento higienizante para que las bacterias no provoquen malos olores.