Teresa Viejo, auténtica

Escrito por CuidateMag el 08/11/2017

Teresa Viejo, auténtica

Acaba de presentar su séptimo libro “Animales domésticos” que se define como “una historia de amor y deseo en estado de ira”. Una reflexión expuesta sin rodeos sobre las relaciones de pareja y el morbo como motor de la atracción sexual narrada en clave de thriller psicológico, que no te dejará indiferente. Teresa es una profesional versátil que ha dejado su impronta en radio, televisión y prensa escrita llegando a ser directora de la revista Interviú. CUÍDATE ha tenido el inmenso placer de hablar con ella.

CUÍDATE: “Animales Domésticos” es tu séptimo libro. Después de tres ensayos y tres novelas has decidido escribir a pecho descubierto y salir de tu zona de confort ¿por qué ahora?

T.V.: Siempre me sucede igual: cuando siento que conozco bien un camino me nace la necesidad de explorar otros nuevos. Me atraía situar la historia en el presente para acercarme a lo que nos perturba a los hombres y las mujeres en materia sentimental. La crisis también ha castigado los protocolos de seducción y terminamos uniéndonos en parejas cada vez menos sólidas. El “amor líquido” de Zygmunt Bauman es una epidemia. Esto me obligaba a narrar una historia desgarrada de heridas a flor de piel y merecía tanto la pena. De todas maneras mi reto pasaba por convertir una aparente historia de desamor en una de amor… aunque no desvelo más.

CUÍDATE: ¿Qué podemos encontrar de ti en “Animales Domésticos”?

T.V.: Lo mismo que en otras novelas: la curiosidad, mi fascinación por la naturaleza humana, por los perfiles psicológicos complejos, por el amor. La intriga, el thriller, en este caso dotando a un mujer de apariencia corriente de las hechuras de un perverso detective… el agua como símbolo del universo emocional. Me temo que repito conceptos que hablan mucho de mí.

CUÍDATE: Te pasas la vida buscando el amor y cuando lo encuentras nada es lo que parece como le ocurre a Abigail, la protagonista del libro ¿Por qué crees que es tan fácil empatizar con ella?

T.V.: El amor llegó a su vida como un choque de trenes y ahora, tras catorce años, la niebla de la rutina envuelve su matrimonio. El hastío, por desgracia, es bastante habitual en la pareja. La infidelidad representa una excusa para sacar de Abigail lo que ni ella conoce. Sus miedos e inquietudes, sus dudas, sus inseguridades, sus certezas, el instinto maternal, los remordimientos, sus límites sexuales, los celos, su sentido de culpa, su conducta obsesiva, las heridas emocionales… resuenan tan dentro que me atrevo a decir que todas hemos sido, o podemos ser, Abigail en algún momento de nuestra vida. Las lectoras me lo dicen a diario y agradecen que haya creado un personaje que les ayuda a entenderse mejor. Y a entender mejor a sus parejas.

CUÍDATE: La novela pivota sobre la infidelidad ¿es más común de lo que pensamos?

T.V.: En la novela la infidelidad me sirve de llave para abrir la puerta de la curiosidad y el morbo porque, una vez identificada, la protagonista debe realizarse muchas preguntas, a modo de bifurcaciones a su paso: ¿Quiero saber o no? Y en caso afirmativo, ¿cuándo me paro en mi investigación? ¿Y qué haré cuando sepa lo que hasta ahora ignoraba? En el plano real la infidelidad es tan común como nos imaginamos porque no creo que nadie sostenga que “eso” solo le sucede a unos pocos; pero no por ello duele menos. No deja títere con cabeza, es un cristal de aumento sobre el resto de las miserias de tu vida. Te traiciona quien tenía tu confianza, ¿cómo superar esto?, ¿cómo restañar la fe perdida? Para algunas personas supone un cataclismo del que tardan tiempo en recuperarse.

CUÍDATE: ¿Amor auténtico o verdadero?

T.V.: Siempre amor auténtico. El verdadero, como concepto absoluto, resulta una entelequia porque quién te asegura que el amor presente sea el verdadero y no el siguiente. Considerar a un amor como “el verdadero” menosprecia a los anteriores o a los que estén por llegar puesto que nada compromete su duración; lo importante es relacionarte desde la autenticidad, se prolongue por un año o por veinte. Ser auténtico conlleva conectar con los demás desde tu propia esencia, desde tu verdad más íntima. Esta actitud es la más hermosa y saludable que podemos adoptar.

CUÍDATE: ¿Piensas que las aplicaciones para ligar son la tumba del amor?

T.V.: No las considero un camino adecuado para encontrar el amor -el auténtico-, aunque sí sirven en el rastreo de intercambios sexuales. El problema surge al mentirse, al pretender una cosa cuando se desea otra. Y no termino de creerme a esas mujeres que aseguran que son tan depredadoras como los hombres, que solo ambicionan presas que llevar a su cama y que el amor romántico está finiquitado. Me temo que no responden con sinceridad a lo que de verdad les pide su alma. De ser así, el autoengaño es tan dañino que a la larga termina causando un mal mayor. A la seducción le marca el compás los silencios, las palabras que se dicen y las que se callan, el roce de una piel… las fascinación de las miradas. Y esto se cocina a fuego lento, no resumiendo la biografía en un puñado de WhatsApp´s.

CUÍDATE: Háblanos de tus proyectos profesionales.

T.V.: Lo cierto es que entre La Observadora (RNE), mi trabajo como Embajadora de La Fundación A Víctimas de Tráfico, UNICEF, mis artículos y charlas se me esfuma la agenda día a día. Ni siquiera actualizo mi blog y me da mucha rabia. Pensaba haber comenzado este año un doctorado en Psicología y he tenido que posponer mis estudios en Comunicación No Violenta a 2018 porque estoy ocupándome de la promoción de “Animales Domésticos”; esta novela es muy importante para mí. Por lo demás me ha costado lágrimas aprender a fluir, más cuando lo logras, todo adquiere un nuevo sentido y siento una enorme paz. Agradeceré al Universo cada opción que me plantee y la recibiré como un regalo.

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