Salud
Cómo tratar una picadura de medusa
Seguramente no te habrás parado a pensar que aguantar nuestro peso a lo largo del día es una labor un tanto, ¿complicada? Caminar, bailar, hacer deporte, es decir, toda nuestra actividad diaria depende de ellos. Por este motivo, queremos recordar la importancia de cuidar los pies como es debido. A continuación, daremos unos consejos para que mimes tus pies como se merecen y evites malos olores, lesiones e incluso algunas infecciones superficiales.
La importancia de cuidarse los pies
Muchas veces nos damos una ducha de lo más express y puede que, no nos entretengamos en todas las partes del cuerpo. Pues bien, los pies es una de ellas… ¿Cómo debemos lavarnos los pies? ¡Muy sencillo! Bastaría con aplicar una pequeña cantidad de jabón y es recomendable que no utilicemos la misma esponja con la que nos hemos lavado las otras zonas del cuerpo. Éstas pueden contener restos de piel o incluso, microbios. Y no queremos infectarnos, ¿verdad? Pero, ¡atención! Tan importante es el lavado como el secado (o hasta más). Para secar nuestros pies debemos usar una toalla específica para ellos y si no la tienes, deja el secado de esta zona para el final. Tenemos que asegurarnos de secar también los dedos y los espacios interdigitales, que es donde más fácilmente puede quedar humedad, y eso puede favorecer el crecimiento de hongos. ¿Sabías que, además de ser un problema de salud, los hongos, bacterias y el exceso de sudor, producen mal olor en los pies?
¿Cómo podemos evitar el olor de pies?
Nuestros pies sudan, y no poco. Sólo en ellos hay unas 250.000 glándulas sudoríparas, por eso, es una de las zonas que tiende a sudar. Pero, pueden sudarnos y no olernos, y no todos los sudores huelen igual.
Como ya hemos mencionado, el mal olor en los pies se debe a la presencia y actividad de bacterias y hongos. Estas bacterias descomponen el sudor provocando el mal olor. Por este motivo, si logramos eliminar el exceso de sudoración, ya sea usando calzado abierto, transpirable y con la ayuda de desodorantes con poder absorbente, conseguiremos decir adiós al olor de pies. ¿Cuál podemos utilizar? ¡Funsol® polvo es la clave! Se trata de un desodorante en polvo que elimina el exceso de sudor y el mal olor de los pies sin dificultar la transpiración normal. Su fórmula combina óxido de zinc y aerosil, una composición perfecta para absorber la humedad, desinfectar, evitar la proliferación de microorganismos causantes del mal olor y reducir el apelmazamiento. ¿Cómo se aplica? Basta con espolvorear 1 o 2 veces al día sobre la planta del pie seca y los espacios interdigitales. También puedes aplicarlos en el interior del calzado, incluso en los calcetines. ¡Tus pies se mantendrán de lo más frescos y sin olores!
Pero si el olor es muy fuerte, lo más normal es que se trate de una infección por hongos, o pie de atleta. La mejor manera de cuidar los pies y evitar que huelan mal es lavarlos bien, mantenerlos secos, y cambiar el calzado de un día a otro. Además, con la aplicación de un desodorante en formato spray, también conseguirás regular el exceso de sudor y eliminar el mal olor. Además, contiene ingredientes de acción antibacteriana y antifúngica que previenen el desarrollo de microorganismos y bacterias, evitando la producción de malos olores y hongos. ¿Cómo aplicarlo? Debes pulverizar 1 o 2 veces al día a una distancia de 20cm de los pies y también puedes usarlo directamente en el calzado y los calcetines.
Y ya cómo último consejo, disfruta del verano y del buen tiempo, pasea con los tuyos, camina por la orilla del mar, recorre diferentes lugares, corre, salta, baila, y no olvides llevar sandalias cómodas que permitan airear tus pies y refrescarlos en el agua de vez en cuando. Pero recuerda, después deberás secarlos muy bien para evitar malos olores e infecciones.
Remedios naturales. Si prefieres algunos trucos más caseros, ¡también los hay! Algunos de ellos: lavar los pies en una solución con agua y té negro, frotarlos con bicarbonato sódico para eliminar las bacterias o incluso con vinagre de manzana. ¿Lo sabías?
Plantillas especiales. Un último truco es usar plantillas específicas para el mal olor de pies. ¿Las mejores? Las que incorporan carbón activo, ya que atrapa y neutraliza el mal olor, y agentes antibacterianos, que combaten las bacterias que lo causan.
¡Ya lo sabes! Tus pies importan. ¡Cuidalos con Funsol!
