Chitosan y garnicia es una fibra que ayuda a retener la grasa y es capaz de fijar lípidos en el estómago antes de que lleguen al intestino y después de la circulación sanguínea. Por otro lado, el HCA es capaz de incrementar la actividad de las enzimas que queman calorías del cuerpo. La combinación de ambos permite que el HCA actúe sobre los carbohidratos para que no se transformen en grasas, mientras que el chitosan es el impedimento principal en la absorción de los ácidos grasos sobrantes.