Advertencias y precauciones
- Consulte a su médico o farmacéutico antes de empezar a tomar FORTASEC 2 mg Cápsulas duras
- Si sufre diarrea grave su cuerpo pierde más líquidos, azúcares y sales de lo normal, necesitará reponer
los líquidos bebiendo más de lo habitual. Pregunte a su farmacéutico sobre preparados para reponer los
azúcares y las sales
- El tratamiento con este medicamento es sólo sintomático, por lo que la diarrea deberá tratarse a partir
de su causa.
- Si padece SIDA y su estómago se hincha, deje de tomar inmediatamente este medicamento y consulte a
su médico
- Si padece alguna enfermedad de hígado, consulte con su médico antes de tomar este medicamento, ya
que podría producirse toxicidad en el sistema nervioso central.
- Si está tomando algún analgésico de tipo narcótico debe consultar con su médico o farmacéutico antes
de tomar este medicamento, ya que puede interaccionar con ellos.
No tome este medicamento para un uso distinto del indicado y nunca tome más de la cantidad recomendada. Se han notificado problemas de corazón graves (cuyos
síntomas incluyen latidos cardiacos rápidos o irregulares) en pacientes que han tomado una cantidad excesiva de loperamida.
Si no se observa mejoría en 48 horas o aparece fiebre, estreñimiento u otros síntomas, interrumpa el tratamiento y consulte a su médico.
Los pacientes con diarrea deben beber abundantes líquidos, para evitar la deshidratación que se manifiesta por sequedad de boca, sed excesiva, disminución de la cantidad de orina, piel arrugada, mareo, aturdimiento. Esto es especialmente importante en niños y ancianos.
Niños y adolescentes
No utilizar en niños y adolescentes menores de 12 años.
Conducción y uso de máquinas
Usted puede conducir y utilizar herramientas y máquinas a menos que note cansancio, mareo o somnolencia. No conduzca ni utilice máquinas en esas ocasiones.
Si toma más FORTASEC 2 mg Cápsulas duras del que debiera
Tomar demasiadas cápsulas puede provocar coordinación anormal, estupor, contracción de la pupila, aumento de la tensión muscular, dificultad para respirar (los niños son más sensibles a estos efectos que los adultos) y reducción de la cantidad de orina.
En caso de sobredosis o ingestión accidental consulte a su médico o farmacéutico.