El agua de aciano, en forma de compresa alrededor de los ojos, ayuda a descongestionar y calmar esta frágil zona del rostro, especialmente en caso de sensación de fatiga ocular o irritación de los párpados. Como loción para la piel, ayuda a tonificar la piel seca y desvitalizada, previniendo la aparición de síntomas de la deshidratación.