Polvo de espirulina 100% orgánica y cruda procedente de cultivos ecológicos de Mongolia. Ayuda a reducir la sensación de fatiga y/o cansancio físico y mental. Además, es fuente natural de ácido fólico, vitamina K, magnesio, zinc, selenio y zeaxantina. Contribuye a mantener el rendimiento físico, mientras favorece las actividades cognitivas. También fomenta el refuerzo de la protección antioxidante de la piel y las células. Apto para veganos. Sin gluten, lactosa ni soja.