Los apósitos de MEPILEX están indicados para tratar una amplia variedad de heridas agudas y crónicas, así como heridas secundarias. Su uso es conveniente para minimizar en gran medida el dolor y el traumatismo que puede producirse al cambiar de apósitos de manera exhaustiva. Contiene una capa de absorción que atrae de manera inmediata la humedad de la herida, protegiendo de esta manera la piel. Dispone de una capa de retención que consigue que se evapore el exudado para conseguir que las capas que están más cercanas a la herida puedan seguir absorbiendo. Estos apósitos cuentan también con una película totalmente impermeable, por lo que es resiste a bacterias y líquidos. Pueden utilizarse como prevención y también como tratamiento de las úlceras por presión, las úlceras de las piernas o los pies diabéticos, así como heridas quirúrgicas o heridas traumáticas.